El rebranding es una estrategia de marketing que consiste en cambiar el logotipo, el nombre, el concepto o el diseño de una marca existente. Este cambio se realiza con la clara intención de que la marca luzca más fresca y nueva. Más del 60% de las empresas deciden cambiar su imagen alguna ves, pues esto las ayudea a recuperar la confianza y el interés del público objetivo y de los inversores. ¿Lo sabías? ¡Sigue leyendo y entérate de más!
Una estrategia de cambio
El rebranding, como mencionábamos anteriormente, es una estrategia de marketing que permite refrescar la imagen de una marca. Para ello, se cambia el logotipo, el nombre, el concepto o el diseño pre – existente. Este cambio se realiza con la clara intención de que la marca luzca tan fresca y nueva que su nueva imagen marque un antes y un después. Además que, resulta una forma interesante de captar la atención y promoverse más ampliamente.
El rebranding es una estrategia de mercado que busca dar una visión nueva e innovadora a una marca establecida: Un nuevo nombre, símbolo o cambio de diseño, son sólo algunas de los aspectos que pueden modificarse. La idea detrás de todo esto es crear una identidad diferente para una marca. La cual se diferencie de sus competidores y sobresalga en el mercado.
Rebranding y renovación…
El rebranding es el proceso de asignar nuevas características y propiedades dentro y fuera de una organización ya establecida y, al mismo tiempo, ofrecer a esa marca existente una nueva identidad. La finalidad es ayudarla a ser reconocida de manera diferente o desarrollar una imagen de marca totalmente nueva en el mercado.
En palabras más simples, cuando las características de la marca como el nombre, el diseño, el logotipo de una organización u oferta ya establecida se cambian o modifican; con el fin de cambiar su imagen de marca existente o hacer que se reconozca de manera diferente, entonces, se trata de un rebranding.
Algunas frases clave en las que debes centrarte para comprender mejor la definición de rebranding son:
- El rebranding implica una nueva imagen e identidad para una marca ya existente.
- El objetivo del rebranding no es crear una nueva marca, sino darle a la existente una cara más fresca. De tal modo que, pueda competir en el mercado y mantenerse en constante cambio.
- El rebranding no sólo se enfoca en las imágenes de la marca, sino también en las operaciones internas que ejecuta la marca.
¿Cuál es el objetivo de esta estrategia?
Hay varias razones para que una empresa opte por realizar un rebranding. Un factor destacado es conectarse con los clientes. El cambio de marca es bueno para el negocio, pero, al mismo tiempo, puede ser riesgoso. Siempre existe la posibilidad de que a los consumidores no les guste la nueva marca. Sin embargo, si se hace un buen trabajo es una estrategia que impulsa y mejora.
Un rebranding podría permitir una conexión más fuerte con el cliente…
Así es. Someterse a un rebranding puede obedecer a varias causas como fusiones y adquisiciones u ofertas de nuevos productos. No obstante y generalmente, surge de la necesidad de crear una conexión más fuerte entre el producto de una marca y la identidad con las audiencias a las que se dirigen. Inevitablemente, las empresas pueden evolucionar significativamente con el tiempo y con respecto a los productos que venden, las audiencias a las que atraen y los mercados en los que operan.
Un proceso de rebranding, entonces, puede ser una tarea bastante complicada y costosa. Pero, cuando se realiza con éxito, tiene el potencial de diferenciar mejor a las empresas de los competidores y alinearse más estrechamente con los deseos, necesidades y valores de los consumidores. Teniendo en cuenta que, el cambio es constante en el vertiginoso mercado digital actual, cada vez más empresas se someten, hoy en día, a iniciativas de rebranding para seguir siendo competitivas.
Razones para optar por un rebranding:
El valor de cualquier marca está dictado por cómo se percibe en el mercado. Si la marca no es atractiva o el público objetivo no puede relacionarse con la marca, entonces, no prosperará a largo plazo. Por lo tanto, el rebranding demuestra ser una estrategia de marca muy favorable a la hora de querer renovar la imagen existente y construir otra imagen respetable e impactante a largo plazo.
Además de esto, las diversas razones para poner en práctica un rebranding son:
- Cambio en el objetivo demográfico: Cada marca tiene un objetivo demográfico que puede y sigue cambiando de vez en cuando y debido a las transformaciones en las tendencias, la tecnología, etc. También, puede cambiar cuando la marca crece y se dirige a un público más amplio que antes. Para poder mantenerse al día con los datos demográficos objetivos y fluctuantes, una marca tendrá que usar el rebranding para seguir siendo atractiva para su amplia audiencia.
- Aparición de nueva tecnología: Muchas veces, la introducción de nueva tecnología hace que sea imperativo que una marca implemente como estrategia de marketing el rebranding y, así, volver a ser relevante. Es posible que, este tipo de cambio de marca no sea una reestructuración de imagen completa, sino solo un cambio en las características de la marca, como puede ser el logotipo de la marca, el eslogan, entre otras.
Por otro lado…
- Aparición de nuevos mercados: A veces, la marca que se adapta a un mercado no es necesariamente adecuada para otros. Por ejemplo, Mcdonald’s. Ésta empresa tuvo que cambiar su nombre a Makudonarudo, cuando planeaba aprovechar Japón como un nuevo mercado. La necesidad de incursionar en un nuevo mercado forzó a la compañía a implementar un rebranding para captar la aceptación del nuevo objetivo demográfico.
- Imagen de marca existente defectuosa: Hay momentos en que la identidad de marca planificada no se convierte en la imagen de marca esperada y resulta contraproducente para la empresa. En tal sentido, requiere que la empresa le dé una segunda oportunidad a la marca implementando un rebranding y mejorando la imagen de marca existente y defectuosa.
- Cambio de propiedad comercial: El cambio de propiedad comercial como el que ocurre en el caso de fusiones, escisiones y adquisiciones, a menudo requiere que una marca cambie su nombre. Esto, para que lo nuevo sea visible y cumpla con los requisitos legales. El rebranding en este caso funciona como solución legal.
- Situaciones emergentes imprevistas: Dado que el mundo está lleno de incertidumbre, siempre existe la amenaza de situaciones imprevistas como bien pueden ser: quiebras, complicaciones legales, mala reputación, entre otras. Para estos casos, ninguna marca puede planificar una solución previa.
Recuerda…
El rebranding puede ayudar a casi cualquier marca a abordar la volatilidad y adaptarse de acuerdo con la situación actual que viva. Si la marca sufre una fuerte caída debido a un evento imprevisto, el cambio de marca puede ser su salvador a largo plazo.